Los Yankees se ven forzados a realizar ajustes en el inicio de temporada

El infortunio ha estado a la orden del día para los Yankees de Nueva York en lo que respecta a la salud de sus jugadores. Desde el final del Spring Training hasta el inicio de ronda regular de las Grandes Ligas, el equipo se ha visto azotado por las lesiones y ya son varios nombres importantes que se encuentran fuera de acción en las primeras de cambio.

Las dos más recientes ausencias de renombre que se sumaron a la extensa lista de la lista de incapacitados son la del tercera base Josh Donaldson y la del lanzador relevista Jonathan Loáisiga, quienes no acompañaran al resto de sus compañeros por al menos un par de semanas.

Donaldson se lesionó durante el partido de los Yankees del 5 de abril contra los Phillies de Philadelphia y se le fue diagnosticada una distensión en el tendón de la corva derecha. El tercera base pareció hacer una mueca mientras corría hacia la primera base tras un elevado en la segunda entrada, luego fue reemplazado en la antesala por Isiah Kiner-Falefa. Se quedó en Nueva York cuando los Yankees viajaron a Baltimore, pero no se sometió a una resonancia magnética. DJ LeMahieu será quien cumpla primordialmente las funciones de defensor del tercer cojín mientras se mantenga alejado del diamante Donaldson.

Loáisiga, por su parte, está lidiando con una inflamación en el codo derecho. Lanzó por última vez el pasado 5 de abril y desde entonces se ha mantenido sin actividades competitivas, mientras es monitoreados por el cuerpo médico de los mulos.

Para cubrir ambas vacantes, los Yankees decidieron llamar de vuelta al equipo grande al novel tirador Jhony Brito, quien había sido enviado a las menores a pesar de haber dejado una muy grata impresión en su estreno en Las Mayores en el encuentro del 2 de abril correspondiente a la serie inaugural en el Yankee Stadium frente a los Gigantes de San Francisco.

En aquella ocasión, el quisqueyano de 25 años de edad trabajó cinco innings completos, sin ninguna carrera limpia, además de aceptar solo un par de hits, regalar una base por bolas y ponchar hasta a 6, suficientes para acreditarse su inolvidable primera victoria en el más alto nivel del beisbol organizado.

Mientras que el otro movimiento correspondiente fue la compra del contrato del también dominicano, aunque de posición, Willie Calhoun, quien se mantuvo con el equipo durante un buen tramo de la pretemporada, antes de ser asignado al Scranton/Wilkes- Barre Railraiders de la categoría Triple A a mediados de marzo.

Para Calhoun será su tercer club en MLB, después de que fuera un importante prospecto en la organización de los Rangers de Texas, con los que debutó en 2017 y se mantuvo allí hasta el verno de 2022 cuando pasó a formar parte de los Gigantes, quienes lo tomaron desde la lista de asignación de los texanos.

De por vida, el paleador zurdo de 28 años de edad ostenta .240 de average, .703 de OPS, con 32 cuadrangulares y 104 carreras impulsadas tras 854 turnos oficiales, consumidos en 257 encuentros. Su zafra más próspera fue la de 2019, cuando dejó promedio al bate de .269 con 21 jonrones y 48 compañeros llevados hasta el plato.

Las lesiones de Josh Donaldson y del nicaragüense Jonathan Loaisiga se suman a las ya reconocidas por mucho y no menos importantes como lo son las del as y recién adquirido de la agencia libre, el zurdo Carlos Rodón, la del abridor dominicano Luis Severino, la del excelso patrullero central Harrison Bader, así como también las de los relevistas Tommy Kahnle y Lou Trivino, sin dejar pasar inadvertidas las ausencias de los también escopeteros Frankie Montas, Scott Effross y Luis Gil.

Todos estos mencionados, a priori, se perfilaban como claves dentro del esquema del manager Aaron Boone para la vigente campaña, aunque para fortuna, la profundidad del plantel confeccionado les permite no verse afectados en demasía por dichas falencias.