A medida que transcurre la temporada regular de las Grandes Ligas, el conjunto de los Yankees de Nueva York está logrando sacudirse de encima un lento inicio de temporada que causó su descenso hasta el último lugar de la tabla en la División Este de la Liga Americana.
Víctimas de las lesiones y de bajo rendimiento de varios de sus jugadores importantes, los Bombarderos encendieron las alarmas y la preocupación dentro de las oficinas no se hizo esperar. Sin embargo, durante las más recientes actuaciones, el equipo ha mostrado una mejor versión, en gran parte gracias a lo hecho por su principal figura, el estelar Aaron Judge.
Después de haber atravesado por un prolongado slump ofensivo e incluso haber tenido una breve estadía por la fatídica lista de lesionados, el patrullero regresó con todos los fueros con una producción voraz, tal y como se espera de alguien al que se le garantizó más de 300 millones de dólares por los próximos tres lustros.
En sus más recientes 10 compromisos desde que retornó a la alineación diaria de los Yankees, el actual Jugador Más Valioso de la Liga Americana arrojó promedio al bate de .324, además de elevado OPS de 1.312, después de disparar hasta 8 extrabases, 6 de ellos jonrones y los restantes dobletes. Aunque para ser más específicos, su verdadera explosión con le maduro tuvo como epicentro a Canadá.
Fue en su más reciente visita al país norteamericano cuando “El Juez” hizo erupción luego de ligar para .429 de average, con 4 cuadrangulares y 7 compañeros llevados hasta el plato en tan solo 14 turnos legales, aunque se presentó al home plate en 19 ocasiones, pero en 5 de ellas los lanzadores tuvieron excesivo cuidado al enfrentarlo; a tal punto, que decidieron regalarle bases por bolas, 2 de ellas de manera intencional.
“Solo estoy tratando de hacer mi trabajo”, le dijo Judge al insider Bryan Hoch tras el partido del jueves en el que los Yankees doblegaron 4 a 2 a los locales Azulejos de Toronto y con el que aseguraron la primera serie de la temporada entre ambos.
El estallido del ataque de Judge se dio en medio de una gran polémica en la que se vio envuelto, luego de que diversos analistas que cubren a los alados lo señalaron de “tramposo”, por estar recibiendo señas desde el dugout cuando algún lanzador se disponía a realizarle un envío. “Estaba molesto, pero no puedo hacer nada al respecto. Todavía tengo que salir y jugar”, manifestó el espigado toletero.
Para el cuerpo técnico y la directiva neoyorquina, resultó todo un beneficio de que su capitán, tras las acusaciones, drenara su frustración con el madero y tuviera una actuación digna de un “MVP”, tal y como la catalogó su manager Aaron Boone.
Para los de Toronto no debería de resultarles una sorpresa lo que realizó Judge frente a ellos en estos primeros careos, pues ellos son una de sus víctimas favoritas en lo extenso de su carrera, en la que ya acumula 32 batazos de vuelta entera en 102 juegos, más que ningún otro integrante de la famosa organización de los Yankees, tras sobrepasar los 31 que les pegó el cátcher puertorriqueño Jorge Posada en un total de 186 compromisos.
“Está motivado por lo que estamos pasando como equipo en este momento”, dijo Boone. “He dicho una y otra vez lo bien que creo que está compitiendo este equipo, y él está en medio de eso. Él entiende que estamos en un tramo difícil aquí, con juegos todos los días contra grandes oponentes. Él entiende lo importante que es para eso. Me alegro de que tuviera ese tipo de serie”, le comentó a Hoch el mandamás Boone, ahora más calmado, después de estar navegando por aguas turbias.
La reincorporación de Aaron Judge ha servido para que los mulos sean uno de los clubes con mejor rendimiento en los últimos días de la MLB al ostentar récord de 7-3 y acortar distancias en el cuarto lugar de la tabla a solo 6.5 juegos con respecto a l líder, los Rays de Tampa.